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El Embarazo y sus etapas trimestre a trimestre

Los malestares más comunes: empezando desde la náusea matutina, vómitos, acidez, reflujo, intolerancia a los olores, dolores de cabeza o incluso el dolor de ovarios o pechos, serán los malestares más comunes mientras llegan las primeras semanas de embarazo.

5 pasos que debes seguir para un parto facil y sin miedo

Mantén tu actividad física, has ejercicios de estiramiento muscular, esto hará que tu cuerpo continúe su actividad regular y ayudes a tu bebé a acomodarse en tu vientre, así como también evitarás retención de líquido y presión arterial en tu cuerpo.

¿Como Cuidar a tu bebe recien nacido?

la alimentacion es parte fundamental para el cuidado de tu bebe, y el higiene es importante en la vida de un bebe.

El Nuevo Mundo de ser Mamá

Ser mamá es una de las dichas más grandes del mundo. Como mamás podemos expresar todo el amor que sentimos por nuestra familia, y no hay nada que se compare con ese sentimiento.

¿Cómo sacar los gases correctamente a tu bebé?

datos que no debo olvidar de esta importante tarea: el sacarle correctamente los gases a mi bebé.

lunes, 17 de febrero de 2014

¿Cómo sacar los gases correctamente a tu bebé?

Vale la pena recordar que mientras nuestros bebés comen o lloran tienden a acumular aire en su estómago, lo cuál es normal mientras madura su sistema digestivo, sin embargo, este aire los hace tener una sensación de llenura antes de tiempo y provocarle cierta incomodidad en su vientre. Es probable que tu bebé llore de incomodidad mientras acumula este aire y no es liberado por medio de eructos, si notas que su carita es de incomodidad probablemente esté teniendo colicos
Los bebés que maman también tienden a acumular gases, algunos dicen que a menor proporción, sin embargo no son la excepción, por lo que también deberás sacarle el aire a tu bebé mientras mama de tu pecho, y mientras le des tetero procura que no succione aire de más, coloca el biberón en la posición más vertical posible y nota que el mamón del mismo no posea burbujas que pueda succionar.
Nunca interrumpas su momento de mamar o comer por sacarle el aire, espera a que termine de comer y luego procede a sacarle el aire de cualquiera de las formas más comunes:
1. Coloca tu mano cerrada en forma curveada, como simulando cuando recoges agua con tus manos
2. Con la mano en esta posición, dale pequeñas palmadas firmes pero suaves, o frótale la espalda con movimiento de abajo hacia arriba de su espalda, de modo que el aire atorado circule hacia su boca
3. Repite lo anterior con tu bebé recostado en cualquiera de estas posiciones:
Sobre el hombro: Coloca a tu bebé sobre tu hombro sujetándolo con el brazo del mismo lado. En esta posición el bebé tendrá el cuerpo estirado y erguido, lo cual facilita que circule y le salga el aire. Con la otra mano, dale leves palmaditas en la espalda o frótasela.
Sentadito: Sienta a tu bebé en tu regazo con su cuerpecito inclinado hacia adelante y con la barbilla apoyada en tu mano y el cuerpo en tu brazo. Dale leves palmaditas con la otra mano o frótale la espalda.
Boca abajo, en tu regazo: Siéntate y acuesta a tu bebé boca abajo sobre tus piernas. Sujétalo firmemente con una mano y frótale o dale palmaditas en la espalda con la otra.

Algunos bebés tardan más en eructar que otros, ten paciencia si el tuyo es uno de ellos, para lograrlo procura cambiarlo de posición, esto hará que el aire circule dentro de su vientre y es probable que cuando logres que eructe, vote un poco de leche, por lo que deberás tener a la mano una toallita para limpiarle.
Es probable que si tu bebé no logra calmarse con los cólicos, consultes entonces con tu médico y él te podrá recetar algún tipo de medicamento o espasmódico que le ayudará a relajar su vientre, también existen algunos masajes que podrán ayudarle a relajarse, como por ejemplo frotar suavemente su vientre entre comidas o cuando ya se acerque la hora “cero”, el momento en que por lo regular son frecuentes los cólicos, alrededor de las 5:00PM en adelante.

martes, 28 de enero de 2014

¿Como cuidar a tu bebe recién nacido?

Alimentación
1. Si vas a optar por alimentarlo de leche materna, considera tomar el tiempo en que vas a lactarlo, 10 minutos en cada pecho por tiempo de comida es lo apropiado para iniciar, de modo que más de ese tiempo estarías dañando tus pechos y corres el riesgo de agrietamientos o sangrado en los pezones. Si ya te has dañado los pezones por el PH o acidez de la saliva de tu bebé, opta por usar lanolina HPA o crema Kamillosan, de modo que así lograrás cicatrizarlos y no causará daños al bebé al momento de tener contacto con dichos cicatrizantes.
2. Alimenta a tu bebé en cada toma con el pecho en que terminaste la toma anterior, es decir que si iniciaste con el derecho y finalizaste con el izquierdo entonces la próxima toma iniciarás con el izquierdo y finalizarás con el derecho, de modo que lograrás vaciar correctamente tus pechos y regular la producción de leche materna.
4. En caso de que necesariamente vayas a alimentar a tu bebé con fórmulas, considera alguna de las siguientes marcas como Enfamil Premium 1, SMA Gold, Similac Advance 1 o Nan 1, diluyendo por cada onza de agua una medida de leche.
5. Procura alimentar a tu bebé recién nacido cada 3 horas, de modo que estarás formándole un patrón, horario o rutina. Si te pide antes, entonces ofrécele un poco de agua pura hervida, y si continúa durmiendo, no le despiertes, la próxima toma tendrá más hambre y tú lograrás espaciar más las tomas.
6. Cuando alimentas a tu bebé de leche materna, el aspecto de sus evacuaciones es de color amarillo mostaza, y seguramente lo hará después de cada alimento; en cambio, cuando tu bebé se alimenta de leche en fórmula, es muy probable que se estriña y sus evacuaciones son un poco más duras y de color amarillo verdoso.
Higiene
1. El hipo, los estornudos, los estremecimientos, la nariz constipada y el que hagan “viscos” son normales en los bebés recién nacidos.
2. Procura bañar a tu bebé a diario, mejor si es durante la noche para que se relaje y te duerma por más tiempo, usa un jabón líquido para bebé. Mientras le estás bañando usa una toalla sobre su cuerpo, de modo que no se sentirá tan desprotegido mientras le cae el agua directamente a su piel, y empieza a mojar de sus pies hasta terminar en su cabeza, así no se asustará tanto y le encontrará el gusto a la sensación del baño.
3. Puedes limpiar el muñón umbilical o lo que será próximamente su ombligo, circuncisión u orificios de aretes cuantas veces sea posible, con un poco de alcohol, o bien con crema cicatrizante de neomicina, NEOBOL. Cubre el ombligo con gasa estéril hasta que solo se le caiga en aproximadamente siete días. Después de que esto suceda, es común que salga cierta cantidad de sangre en el transcurso del primer mes de vida. Evita usar ombligueros, ya que éste solo mantendrá húmedo el ombligo y aumentará el riesgo de infección. Un ombligo entre más ventilado esté, más rápido sanará.
4. Evita arropar en exceso a tu bebé y procura que no sude ya que esto ocasionaría “sarpullido” y otras irritaciones en la piel que le podrían predisponer a otras infecciones de la misma.
5. Para el cambio de pañal, usa torundas de algodón y agua pura para limpiarle el área genital. A esta edad aún no es apropiado usar toallitas húmedas. Para evitar rozaduras, usa vaseline en toda el área para mantenerla protegida y humectada, si en caso aparecen rozaduras, usa cremas con óxido de zinc tipo DESITIN.
6. En el caso de que tu bebé haya sido niña, las mujeres tienden a presentar un desecho vaginal blanquecino los primeros días de vida y a veces hasta con estrías sanguinolentas. Esto es normal y se debe a la deprivación de las hormonas maternas.
7. Usa un hisopo con aceite para bebé para limpiar los pies de tu bebé en el área entre los dedos, así como también en el pabellón de su oreja, de modo que así eliminarás todo rastro de agua que quede luego del baño y evitarás la aparición de hongos.
Recuerda:un bebé recién nacido no necesita más que ser alimentado, limpiado y mimado, por eso hazlo cuantas veces te sea posible, sus necesidades son básicas en este momento, y tu bebé no se “amañará” o mal acostumbrará de que lo cargues y arropes durante los primeros 3 meses, ya que esto le hará sentirse cómodo como en tu vientre materno.

5 pasos que debes seguir para un parto fácil y sin miedo


1. Mantén tu actividad física: Si tu médico ginecólogo aún te lo permite porque tu embarazo no sufre de ningún riesgo, trata de mantener una caminata diaria de 30 minutos, 3 ó 5 días a la semana. Procura hacer tus ejercicios de estiramiento muscular, como subir y bajar gradas con moderación, esto hará que tu cuerpo continúe su actividad regular y que ayudes a tu bebé a acomodarse en tu vientre, así como también evitarás problemas de retención de líquido y presión arterial en tu cuerpo.
2. Alimentación sana y balanceada: De las cosas que más nos cuesta a las embarazadas, es mantener un control en nuestro peso, sobre todo cuando hemos tenido uno que otro antojo a lo largo del embarazo, lo cierto es que entre más yogurt, líquidos, granos, fruta y verdura comas, tu nivel de fibra estará balanceado, lo cuál te ayudará a evitar problemas de estreñimiento frecuentes en el embarazo.
3. Infórmate bien: Mientras más te informes acerca del embarazo y parto, tendrás una mejor comprensión de este proceso que está viviendo tu cuerpo, además eliminarás temores de información falsa que te llegue, para esto es importante que compartas tus dudas con tu médico para que él te las aclare.
4. Preparación para el parto: Las técnicas de relajación y respiración te ayudarán a aprender a reconocer y liberar tensión, como a prepararte cuando llegue una contracción, cuando éstas incrementen su fuerza y tiempo, como también te ayudarán a controlar los dolores durante tu embarazo y parto. Las respiraciones te ayudarán a disminuir el estado de alerta y las presiones y preocupaciones relacionadas al estrés que llevas durante la gestación, cuando asocias que estás por convertirte en mamá.
5. Comparte con tu pareja: Mantén y genera una actitud positiva, comparte todo lo que estás viviendo con tu pareja, de modo que él pueda apoyarte y comprender todos los cambios por los que estás pasando, así también él podrá participar de algún modo y prepararse para la llegada de su hijo también.

El embarazo y sus etapas trimestre a trimestre

Primer trimestre (del mes 1 al mes 3)
1. Los malestares más comunes: empezando desde la náusea matutina, vómitos, acidez, reflujo, intolerancia a los olores, dolores de cabeza o incluso el dolor de ovarios o pechos, serán los malestares más comunes mientras llegan las primeras semanas de embarazo. Todos estos malestares son efecto del ajuste hormonal que está tomando tu cuerpo para acoger a la nueva criatura dentro de ti, pero es cuestión de algunas semanas, no de los 9 meses, lo más probable es que al llegar la semana 12 todos estos síntomas incómodos ya hayan pasado en la mayoría de mujeres.
2. Los cambios de humor: las mujeres estamos más hormonales de lo normal, hay una gran cantidad de hormonas que se están produciendo para formar a ese pequeño ser, por lo tanto van a haber momentos que de pronto nos sentiremos profundamente tristes, deprimidas, abatidas o extremadamente felices y positivas habiendo estado enojadas 2 minutos atrás. Los cambios de humor van disminuyendo en la medida que el embarazo va avanzando, lo importante es que estés consciente de que tus cambios de humor son producto de tu embarazo y que trates de moderarlos en la medida que sea posible.
3. El miedo: es muy probable que tengas pensamientos fatalistas, temor de contarle a tus más cercanos que estás embarazada, que dudes que estés embarazada y por lo tanto que crear que es un retraso o que vas a perderlo, lo importante es que para disminuir este miedo trates de ir a tu médico lo antes posible para que él te dé la seguridad que todo vaya marchando bien desde un inicio. También puede que te invada un miedo psicológico por el que pierdas tu autonomía o independencia por la llegada de esta etapa en tu vida y te hagas preguntas como “podré cuidarle?”, “seré una buena mamá?”, “podré tener relaciones con mi pareja?” etc. lo cual es totalmente normal que te cuestiones, más si se trata de tu primer embarazo.
4. Mi cuerpo se siente diferente: desde los pechos que ahora crecen desmedidamente, se endurecen y están hiper sensibles, hasta sentir la sensación de llenura o vientre abultado serán los cambios que físicamente empezarás a notar en tu cuerpo, nada fuera de lo común, incluso no a todas les pasa.
5. Sueño profundo: no lo catalogaría como un malestar, puesto que dormir a veces es reconfortante. Las mujeres en las primeras semanas manifiestan un sueño excesivo y profundo a toda hora, que es mejor que te des una siesta corta durante el día, o terminarás agotada.

Segundo trimestre (del mes 4 al mes 6)
1. Los primeros cambios notorios en el cuerpo: seguramente tu ropa ya no te quedará bien como antes, esto significa que es tiempo de usar ropa de maternidad, tu vientre crecerá y si no lo demuestras es probable que por allí alguien crea que simplemente “has engordado” y si te lo dicen seguramente no te agradará nada escucharlo, por tal razón, la ropa de maternidad o blusas ajustadas que dejen ver tu pancita son los mejores aliados de esta etapa en que tu pancita se abulta rápidamente. Otro cambio es que probablemente vayas a necesitar una nueva talla de brasier o sujetador, porque tu tamaño tiende a aumentar en el segundo semestre y esto te evitará molestias y definirá mejor la forma de tu busto. Algunas mujeres empiezan a manifestar cierto oscurecimiento en las axilas, pezones o en la línea vertical sobre el vientre materno, esto también es consecuencia del cambio hormonal que está viviendo tu cuerpo, que luego del parto regresarán a su color regular.
2. Llega el bienestar: dejarás por un lado los malestares del primer trimestre y empezarás a disfrutar más de tu embarazo y el peso de tu pancita no te hará sentir tan cansada aún. Esta es la etapa ideal para hacer algún viaje de vacaciones previas a tener a tu bebé, porque no te agotarás con tanta facilidad como en el tercer trimestre y tus cambios de humor se verán más regulares a como eran durante el primer trimestre.
3. Aumento de apetito y peso: es probable que experimentes un aumento de apetito en las últimas semanas, disfrutarás más de la comida pero ten cuidado porque si lo haces desmedidamente entonces tu peso comenzará a subir sin control alguno; evita el azúcar refinada, las sodas, postres, frituras y grasa saturada y mejor sustitúyelos por fruta, verdura, yogurt, queso reducido en grasa y proteínas.
4. La planificación: es probable que en este trimestre puedas conocer el sexo de tu bebé, lo cuál te permitirá planificarte en ciertos aspectos como: elegir el nombre, preparar la habitación, empezar las compras necesarias, etc. aprovecha a hacerlo ahora que no estás tan agotada como en el último trimestre.
5. El primer contacto con tu bebé: los ultrasonidos, en particular el 4D, son el primer contacto con tu bebé y a través de estos podrás conocer el sexo, sus rasgos, la posición dentro de tu vientre, etc. Otro contacto importante que estableces en este trimestre es el sentir por primera vez cómo se mueve con tal precisión cuando se voltea, patea o se estira, lo cual puedes compartir con tu esposo para que lo sienta con su mano sobre tu vientre también.
6. El constante olvido: pareciera mentira, pero la memoria empieza a fallar, así que hazte de notitas y recordatorios porque lo más seguro es que en lo que recuerdas hacer algo y no lo lleves a cabo, puede que se te olvide en los próximos minutos.

Tercer trimestre (del mes 7 al mes 9)
1. El cansancio: seguramente te sentirás físicamente más cansada de lo normal, claro el peso de tu pancita y muchas veces la acumulación o retención de líquidos en algunos casos puede ser motivo de cansancio físico, tus piernas tienden a sentirse más cargadas y tu espalda recibe el peso de tu pancita. Procura descansar por períodos durante el día, o cambiar de actividad a una que te provoque relajación. No olvides caminar por lo menos durante 20 minutos para mejorar la circulación sanguínea de tu cuerpo.
2. Dificultad para dormir: el cansancio físico que sientes probablemente esté asociado a que no puedes dormir tan cómoda o plácidamente como antes, ahora te estarás despertando por lapsos de cada 3 horas, dicen algunas personas que son las horas en que despertará tu bebé y que tu cuerpo está acostumbrándote desde ya a este develo. También sentirás dolor de cintura, pelvis, cadera o incluso fatiga al respirar, para evitar estas incomodidades, procura colocar una almohada entre tus piernas y duerme sobre tu lado izquierdo, este lado permite que la sangre circule mejor y que tu oxigenación no se vea afectada al momento de dormir, entonces te sentirás menos sofocada al respirar por el peso de tu pancita.
3. El aumento de peso: entre la regulación del apetito y el crecimiento de tu bebé, estarás experimentando cambios en tu peso porque la demanda de alimento será más, lo importante es que mentengas una dieta equilibrada para que no aumentes demasiado, ya que alrededor de 20 – 22 libras es lo razonable aumentar durante un embarazo desde su inicio, de lo contrario te costará mucho bajar las libras de más luego del parto.
4. Vuelven los cambios de humor: si creías haber dejado los cambios de humor en el primer trimestre, te tengo malas noticias, en la medida en que el estrés por el parto y la ansiedad por que todo salga bien y que todo esté preparado para la llegada de este nuevo miembro de la familia, es probable que vuelvas a experimentar cambios de humor y que termines rematando con tu pareja, tómalo con calma.
5. Vuelve el miedo: durante este trimestre el tipo de miedo que se experimenta es muy diferente al miedo del primer trimestre, aquí te harás preguntas que te puedan aturdir como “será parto normal o cesárea?”, “me dolerá la recuperación?”, “será mi hijo normal?”, “vendrá sano?”, “se me adelantará?”, “será prematuro?”, es normal que te preguntes todo esto, pero lo único que te tranquilizará será que tu médico responda estas preguntas por ti.
6. El síndrome de la preparación del nido: cuando se acerca la fecha del parto, comenzarás a verificar que esté todo listo y puesto en su lugar, prepararás la cuna, el ropero, la maleta para el hospital, la ropita del bebé, etc. todo con el propósito de tener listo el “nido” para su llegada, a casi todas las mamás les pasa esto, y es aquí donde terminan de acoplarse psicológicamente a la llegada de un nuevo miembro al hogar.